Sin la última clase
Escrito por:
Deporte y Ocio
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domingo, 28 de diciembre de 2014
Roger Federer no disputó la final por una dolencia en la espalda y Novak Djokovic se consagró en el Masters de Londres
Londres se quedó sin el acto final, sin la frutilla del postre, sin la última clase. El maestro de maestros, Roger Federer, decidió dar un paso al costado. En pos al espectáculo, a su integridad física y a su honor como jugador. Una dolencia en la espalda le impidió dar una nueva cátedra de tenis. La batalla y la hazaña frente a Stanislas Wawrinka dejaron secuelas. “Me sentía bien hasta el tie break de ayer, pero sentí de repente algo en la espalda. Traté de tener tratamiento, medicación, para tratar de voltear la situación de la forma más rápida posible, sin embargo, no sentí una gran mejora por la mañana”, aclaró Roger.
Novak Djokovic recibió el trofeo y se coronó por tercer año consecutivo bajo el techo del O₂ Arena. Nuevamente cerró el año como Nº1 del mundo, pero con un sabor agridulce y una sonrisa que solamente eran de compromiso para los camarógrafos. “No soy el tipo de jugador que celebra este tipo de triunfos. Siempre damos el 100 por ciento”, dijo Djokovic. “Estoy seguro que hubiera jugado si hubiera podido. Le deseo lo mejor en su recuperación”, sentenció el campeón.
La sensación de desazón se extendió hacia todo el estadio. Todos quedaron compungidos cuando, el suizo, explicó las razones de su abandono. Los cientos de espectadores que abonaron sus entradas para este gran encuentro tuvieron que conformarse con una exhibición entre “Nole” y Andy Murray. Luego, el escocés formó dupla con John McEnroe para jugar un dobles frente a Tim Henman y Pat Cash. Una mínima compensación de la organización del torneo.
Con 33 años, Roger Federer, solamente se retiró en tres ocasiones en toda su carrera. Las razones siempre recayeron en molestias en la espalda. Ahora el suizo piensa en su futuro y en una pronta recuperación para la final de Copa Davis. “Definitivamente estoy deseando que llegue el 2015. Este ha sido un gran año para mí. Jugué un tenis maravilloso, muy consistente y muy físico también”, dijo Federer.
Tanto el suizo como el serbio redondearon una temporada fantástica. En el sprint final batallaron por el Nº1 del circuito ATP y el mundo del tenis esperó un cierre de gala entre ambos. Dos maestros que no pudieron concluir con la última clase.
@SergioInsfran
Londres se quedó sin el acto final, sin la frutilla del postre, sin la última clase. El maestro de maestros, Roger Federer, decidió dar un paso al costado. En pos al espectáculo, a su integridad física y a su honor como jugador. Una dolencia en la espalda le impidió dar una nueva cátedra de tenis. La batalla y la hazaña frente a Stanislas Wawrinka dejaron secuelas. “Me sentía bien hasta el tie break de ayer, pero sentí de repente algo en la espalda. Traté de tener tratamiento, medicación, para tratar de voltear la situación de la forma más rápida posible, sin embargo, no sentí una gran mejora por la mañana”, aclaró Roger.Novak Djokovic recibió el trofeo y se coronó por tercer año consecutivo bajo el techo del O₂ Arena. Nuevamente cerró el año como Nº1 del mundo, pero con un sabor agridulce y una sonrisa que solamente eran de compromiso para los camarógrafos. “No soy el tipo de jugador que celebra este tipo de triunfos. Siempre damos el 100 por ciento”, dijo Djokovic. “Estoy seguro que hubiera jugado si hubiera podido. Le deseo lo mejor en su recuperación”, sentenció el campeón.
La sensación de desazón se extendió hacia todo el estadio. Todos quedaron compungidos cuando, el suizo, explicó las razones de su abandono. Los cientos de espectadores que abonaron sus entradas para este gran encuentro tuvieron que conformarse con una exhibición entre “Nole” y Andy Murray. Luego, el escocés formó dupla con John McEnroe para jugar un dobles frente a Tim Henman y Pat Cash. Una mínima compensación de la organización del torneo.
Con 33 años, Roger Federer, solamente se retiró en tres ocasiones en toda su carrera. Las razones siempre recayeron en molestias en la espalda. Ahora el suizo piensa en su futuro y en una pronta recuperación para la final de Copa Davis. “Definitivamente estoy deseando que llegue el 2015. Este ha sido un gran año para mí. Jugué un tenis maravilloso, muy consistente y muy físico también”, dijo Federer.
Tanto el suizo como el serbio redondearon una temporada fantástica. En el sprint final batallaron por el Nº1 del circuito ATP y el mundo del tenis esperó un cierre de gala entre ambos. Dos maestros que no pudieron concluir con la última clase.
@SergioInsfran
